El Salvador. Después de 22 años, tal vez mi última estancia en “El Pulgarcito de América”
diciembre 2019
Hace 22 años de mi primera estancia en El Salvador, en 1997. A partir de entonces, todos los años regreso al “Pulgarcito de América” para seguir colaborando, a través de nuestra Asociación Amanecer Solidario (ASOL), con nuestra Asociación hermana Nuevo Amanecer de El Salvador (ANADES).
He estado de nuevo acompañando a las personas de distintos lugares en donde ANADES y ASOL seguimos colaborando en los Proyectos, en Perquín y Torola, en San Ramón, Mejicanos, en Jayaque, en Santa Ana, en Cuisnahuat, en San Julián. Estos Proyectos se están llevando a cabo gracias a la solidaridad de muchos organismos como el Ayuntamiento y la Diputación de Valencia, los Ayuntamientos de Amorebieta y Morella, la solidaridad de Asociaciones y grupos como Comunidades Eclesiales de Base, Antígona, Parroquia de Vera, Hermanas dominicas… Pero principalmente por las aportaciones, colaboraciones y trabajo de las personas colaboradoras, voluntarias y socias de ASOL, en estrecha colaboración con las personas que trabajan diariamente en ANADES y fundamentalmente por el empuje y el trabajo de las personas que son las principales protagonistas de los Proyectos, las mujeres de los huertos en el proyecto de soberanía alimentaria, las mujeres de las “cajas comunitarias”, las niñas y niños de los Centros Infantiles, sus familias, las y los adolescentes y jóvenes, las promotoras de salud y, esencialmente, las mujeres salvadoreñas que cada vez más son protagonistas de su futuro y el de sus familias.
Creo que sí, está habiendo cambios positivos en los 10 años últimos de gobierno de izquierdas, por ejemplo, en el campo de la promoción de la salud, la prevención de enfermedades, la educación, la mujer, etc. Pero queda aún camino por recorrer. El Salvador sigue siendo uno de los países con mayor desigualdad, los retos son todavía considerables, como el acceso a agua potable, la vivienda, el problema de la violencia, etc. Este año ha habido cambio de gobierno, se está intentado frenar algunos programas progresistas anteriores, pero estoy segura que el pueblo salvadoreño no permitirá que se dé marcha atrás en los logros alcanzados.
En relación a mi colaboración con ASOL quiero indicar que todas las cosas tienen un comienzo y un fin. En marzo del 2021 hay nuevas elecciones de ASOL y dejo mi etapa como Presidenta. Seguiré como colaboradora y socia, y si regreso algún día a El Salvador será sólo como “Amparito” amiga y compañera.